Quizá
en algún momento en que transites por el norte de la Patagonia, tus
ojos se
"claven" en un punto rojo, muy rojo; teniendo como telón de
fondo el verde de las arboledas, de los arbustos o de los pastizales.
No
es para menos. Aunque pequeño (13 cm), el churrinche no puede pasar
desapercibido.
Su
plumaje contrastante entre el rojo fuego en su copete, su pico negro
acompañado de un coqueto "antifaz" negro al igual que sus
alas, espalda, patas y cola, y su pecho rojo intenso; lo visten de una belleza inefable. Estas
son las características del churrinche macho, por cuanto el plumaje de
la hembra es menos llamativo; con colores grisáceos parduscos. |